Radioaficionado

El niño radioaficionado de los años 80 y aquellos Walkie Talkies Blancos.

Lo primero que recuerdo sobre mi relación con la radioafición, a mediados de los 80, son aquellos walkie talkies de los años 80, eran blancos y se vendían como juguetes para los niños. Imagino que se vendían como rosquillas porque los veía por todos lados! Algún amigo mío los trajo a casa y me quedé fascinado. Hablábamos entre nosotros en la distancia, podíamos escuchar a otras personas hablando, que se colaban sin saberlo en nuestra frecuencia. Eso era exactamente lo que quería tener.

Recuerdo perfectamente aquella caja azul a cuadro con un robot Transformer en la portada. Estaba realmente obsesionado con aquellos Walkies Talkies y mis padres lo sabían. Poco después, tal vez en un cumpleaños o los reyes magos, trajeron a mi casa algo mejor, un pareja de Walkies de General Electric, los Star Code 10 y los disfruté durante varios años, cuidándolos como si fueran oro puro. Aquellos aparatos fueron los culpables, con los que todo empezó.

El adolescente radioaficionado de los años 90. Breico, breico.

Y a mediados de los 90, cuando aquellos Walkie Talkies ya eran solo un recuerdo de mi infancia y todas mis aspiraciones como radioaficionado quedaron latentes como un simple recuerdo divertido, no sé como, un amigo del colegio hizo algo por mi que volvería a despertar mi afición, esta vez de forma explosiva. Jose Pereira, si llegas a leer esto, gracias! no sabes cuanto te agradezco aquella vez que desinteresadamente apareciste en el colegio con tu emisora de radio para prestármela. Los años 90, la época dorada de la radio CB y yo, en mi casa, con una emisora de 27 Mhz montada y sacando la antena por la ventana de mi cuarto. Jose, espero que Google te ayude a encontrar este artículo si un día buscas tu nombre en Internet.

Empecé a modular de verdad, aquello ya no eran Walkies de juguete y sinceramente me vi abrumado por tener semejante equipo en mi casa. Por aquella época era obligatorio tener licencia para emitir por la banda ciudadana, pero con una emisora prestada que no se quedaría toda la vida conmigo, la verdad es que me dejé llevar. Era imposible que en mi casa se pudiera comprar un equipo parecido o pagar una licencia, así que esto era temporal y, como muchos compañeros que conocí modulando, me dediqué a aprovechar cada segundo frente a la emisora de forma "extra oficial".

Todos tenían apodo en la CB y el mio era Moki. Aprendí que estas emisora de 27 Mhz tienen 40 canales, que había que vigilar las estacionarías y que para hacer una llamada solo tenías que elegir un canal, pulsar el PTT y decir "breico, breico". Lo que desde luego no esperaba era conocer a tanta gente agradable y mucho menos que mis ondas llegaran tan lejos! Yo estaba por el Aljarafe Sevillano y de noche podía hablar con personas que estaban a 15 o 20 kilómetros de distancia, creo recordar contactos con Huelva, Jerez y Málaga. Y las verticales! madre mia! En los 90 la banda ciudadana era una verdadera red social con muchas personas activas. Aun así hice amigos, tenía charlas muy agradables o ruedas, como las llamamos en el argot.

Quedaba con gente para conocernos en persona como Jose Antonio con indicativo Barón Rojo (pero no el Rey), en los 40 principales. Buena amistad tuvimos y con su hermana Silvia, gran amiga con la que sigo en contacto. Fernando Bulldog, un entusiasta del cacharreo. Hicimos vertical en su casa de Los Remedios, en Sevilla, donde en enseñó su cuarto con emisoras y sus inventos de electrónica, que grande Fernando. Bombero, de San Juan de Aznalfarache, divertido y siempre agradable en las ruedas. Pero recuerdo también con especial cariño a un señor mayor, también Sevillano, que se hacía llamar Cosmos 2. Había quedado ciego y sus hijos le regalaron la emisora para ayudarle a superarlo. Era un hombre culto, de voz dulce y rasgada, que cuando empezaba a hablar contaba historias preciosas, sabía idiomas y creo recordar que había viajado mucho. También le echo de menos.

Radioaficionado con Walkie Talkies Baofeng, la radioescucha y SDR, la radio definida por software.

Aquella emisora CB que Jose me prestó volvió a su dueño y desde mediados de los 90 hasta unos 10 años más tarde mi actividad como radioaficionado desapareció por completo. Lo echaba de menos, pero ni las circunstancias ni los recursos me permitían volver. Hasta que en una época más reciente, ya a partir de 2010 descubrí Aliexpress. No tardé mucho en comprar mi primer Walkie Talkie Baofeng, el UV-5R+, después el UV-82. Equipos de UHF y VHF con los que no podía emitir sin licencia pero eran buenos para hacer algo de radioescucha.

Empezaba a plantearme de verdad eso de tener licencia de radioaficionado, pero no estaba a mi alcance y por aquella época la banda ciudadana aun no era de libre acceso. Así que me centré en la radioescucha y descubrí los dispositivos SDR para escuchar las frecuencias de radio con el ordenador. Compré un TRL y una antena bibanda para sacar por el balcón. La tecnología SDR para alguien que solo había tenido una breve experiencia con una emisora prestada y algunos Walkies fue como entrar en un buffet libre. Me quedé con la boca abierta cuando vi por primera vez en mi pantalla todo el espectro de frecuencias disponibles para escuchar. Y eso que solo podía captar una pequeña parte del espectro con aquella antena, una Abbree SG-M507.

Todo lo que hacía me sabía a poco y volví a plantearme el examen para tener licencia e indicativo de radioaficionado. Me hice con el libro, comencé a practicar con tests online y parecía que esta vez conseguiría mi indicativo, pero de nuevo las circunstancias en mi vida limitaron mucho mi tiempo y recursos. Sin licencia, mi actividad era muy pasiva y se limitaba a la radioescucha y el aprendizaje. Me vi con una colección de Walkies que no podía usar para emitir, pero los adoraba y los coleccionaba con un cariño muy especial. Compré algunas antenas mejores y algo más de equipo. Por mi buena relación con la informática también llegué a montar dispositivos SDR con una Raspberry. También descubrí que hay toda una red de servidores SDR en internet disponibles para usar de forma libre a través de sus páginas web, gracias al trabajo de muchos radioaficionados que lo ofrecen de forma desinteresada. Ahora podía escuchar las frecuencias de radio de todo el mundo, pero si estás leyendo esto y compartimos afición, sabes de sobra que un radioaficionado tiene más intereses además de coleccionar Walkies chinos y hacer radioescucha. Y en el momento preciso, cuando pensé que estaba estancado y sin recursos, la banda ciudadana de radioaficionados se libera. Ya no era necesario ni examen, ni pagos ni licencia para tener una emisora de 11 metros y emitir. Seguro que te haces una idea de lo que voy a contarte a partir de aquí.

Radioaficionado CB 27 Mhz, radioentusiasmado. 30ADEA

Cuando a mediados de los 90, mi amigo José Pereira me prestó aquella emisora de 11 metros, la banda ciudadana ya llevaba 20 años o más en apogeo. Era la época dorada de la CB y cuando empecé a modular allá por el 95, aun era muy buena época. Pero la banda ciudadana empezó a perder actividad de forma exagerada y para comienzos de 2000 la caída era prácticamente en picado. Años después con la llegada de las redes sociales a internet, Whatsapp y otros medios de comunicación, la banda de 27 Mhz recibe un golpe concluyente. Esto no significa que hubiera muerto, pero su actividad quedó tan limitada que solo algunos radioaficionados fieles y operadores de contactos a larga distancia (DX) mantuvieron sus emisoras CB conectadas.

La CB tenía el pulso por los suelos. A mediados de 2014 la banda ciudadana "se libera" quedando exenta de licencia, ni pagos, ni exámenes o trámites. Puede que esta liberación haya llegado tarde, tal vez ha llegado precisamente porque ya es tarde, pero la CB ahora es libre. Desde entonces no dejaba de darle vueltas a la idea de volver a CB. Ya tenía claro que no había mucha actividad, pero con una inversión pequeña podría hacerme con un equipo decente, recuperar la experiencia que recuerdo con tanto cariño y además poner mi granito de arena para darle algo de vida a la banda ciudadana. No fue hasta finales de 2022 cuando tomé la decisión de hacerme con una emisora propia y buscando ayuda abrí un hilo en el foro de Escáner Frecuencia.

Resulta que he vuelto, sabiendo que la CB no tiene mucha actividad, pero ilusionado y con ganas. Ahora salgo desde el Aljarafe de Sevilla, con una AnyTone 5555 plus y una antena Sirio Boomerang 27A. Todo muy modesto, pero poco a poco y a partir de aquí seguiré. Tampoco me veo llenando una habitación de emisoras en un futuro próximo, pero como me conozco, mejor no hablo. No dejo de pulir mi Walkies, sigo con mi radioescucha SDR y tengo una idea loca de participar en algún proyecto que beneficie las frecuencias PMR (una red de repetidores PMR, pero eso te lo digo al oido, entre tu y yo), pero ahora también tengo una emisora de 11 metros en casa y si un día recibes una llamada por esa banda con el indicativo de 30ADEA o Luis, salúdame! Mientras seguiré actualizando este artículo con cualquier novedad. 73!

No encuentro mejor lugar para añadir algunas escenas de películas relacionadas. Seguramente las conoces pero si no, te podrían gustar.

Se proyecta la instalación de la antena Sirio Boomerang 27A para CB en azotea de edificio comunitario. Actualmente tengo la antena instalada en mi propio balcón de una terraza (segunda planta de 3), con edificios cercanos de la misma altura al este y mi propio bloque de vecinos tapando el norte. Algo más despejado al oeste y visión directa del horizonte al sur. Estas son unas condiciones muy pobres para cualquier antena y tras consultar permiso para la instalación en azotea, me dispongo a organizar dicha instalación.

El lugar elegido es una columna con respiradero donde otros vecinos ya han instalado parabólicas. La idea es utilizar un mástil de unos 3 ó 4 metros para superar el resto de instalaciones, en su mayoría antenas de TV que por su orientación darían las espalda a mi antena. Actualmente no sé si para la altura planteada, tipo de antena y lugar de instalación será necesario añadir "vientos", pero sospecho que el propio anclaje del mástil a la columna, mediante base de mástil atornillada, podría ser suficiente. He calculado unos 25 metros de cable RG58 para el recorrido desde la antena en la azotea hasta la emisora en mi domicilio.

Me preocupa la tarea de recalibrar la antena, si fuera necesario, una vez esté instalada en la azotea. Actualmente estoy buscando completar recursos, hacer la compra de material (base de mástil para fijación, cable y conexiones), así como la posible contratación de un profesional o la ayuda de alguien con experiencia.

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8 Diciembre 2023
Hace casi un año desde los planes de instalación de antena, que finalmente quedó instalada, poco después de planearlo, en la azotea, pero en una pequeña pared, con su codo y mástil. Efectivamente recalibrar la antena ha supuesto un problema que aun no he solucionado. En algunas bandas y frecuencias emitir resulta imposible a causa de un ROE muy elevado. Esto me ha condicionado mucho la actividad de radio y definitivamente es un punto al resolver.